Con una historia que se remonta al 782 a.C., Ereván es una de las ciudades más antiguas del mundo, y su vibrante presente se refleja en cada esquina de esta metrópolis.
Ereván es conocida como la "Cuna del Cristianismo" debido a su temprano abrazo de la fe cristiana en el año 301. Esta herencia se ve en sus arquitecturas antiguas y modernas. La Plaza de la República es el corazón de la ciudad, rodeada de edificios gubernamentales de estilo soviético que ahora albergan museos y galerías. Aquí, cada noche durante la primavera y el verano, se puede disfrutar de un espectáculo de luces y fuentes que bailan al ritmo de la música clásica.
La Cascada de Ereván: Esta impresionante estructura no solo ofrece vistas panorámicas de la ciudad y del monte Ararat, sino que también alberga el Centro Cafesjian de las Artes, un espacio dedicado al arte contemporáneo. Las escaleras mecánicas dentro de la cascada llevan a los visitantes a través de diversas exposiciones artísticas.
Matenadaran: Este instituto de manuscritos es un tesoro cultural donde se conservan más de 17,000 manuscritos antiguos. Los visitantes pueden admirar la arquitectura inspirada en la armenia medieval y explorar la historia escrita de Armenia.
Monumento al Genocidio Armenio: Un lugar de reflexión y memoria, el Dzitsernagapert (o Tzitzernakaberd) es un monumento dedicado a las víctimas del genocidio armenio. El sitio incluye un museo con documentación y artefactos que narran este trágico episodio de la historia armenia.
Mercado Vernissage: Ideal para los amantes de la artesanía y el arte, este mercado al aire libre es el lugar perfecto para comprar souvenirs únicos como joyería, cerámica, y obras de arte, todo ello con un toque profundamente armenio.
Fortaleza de Erebuni: Para aquellos interesados en la arqueología, Erebuni es una visita obligada. Este sitio es donde Ereván comenzó, y el museo adjunto ofrece una visión profunda de la historia antigua de la región.
Madre Armenia: Situada en el Parque de la Victoria, esta estatua de 22 metros de altura simboliza la fortaleza y la resistencia de los armenios. Desde aquí, las vistas de la ciudad son espectaculares.
La cocina armenia es una razón más para visitar Ereván. Desde los famosos kebabs hasta el lavash, un pan plano tradicional, la gastronomía local es rica en sabores y tradiciones. La ciudad también es conocida por sus cafés de jazz y su animada vida nocturna, donde se pueden degustar vinos locales y disfrutar de la música en vivo.
Ereván es una ciudad que ofrece mucho más que su historia milenaria; es un lugar donde la cultura se vive en las calles, en sus mercados, museos, y parques. Con su hospitalidad legendaria, los visitantes se sienten como en casa, sumergiéndose en una experiencia que combina lo antiguo con lo moderno, la tradición con la innovación. Ya sea para explorar su rica herencia, disfrutar de su arte y arquitectura, o simplemente saborear su gastronomía, Ereván es un destino que merece estar en la lista de cualquier viajero.