Sin duda, uno de los destinos más emblemáticos para los amantes de la fantasía es Nueva Zelanda, escenario de la trilogía original de "El Señor de los Anillos" y las películas de "El Hobbit". La región de Matamata es hogar de Hobbiton, donde se puede visitar el set de filmación original de La Comarca. Además, el Parque Nacional de Tongariro ofreció paisajes para Mordor, y las Cuevas Waitomo fueron el lugar para la escena de Gollum. La belleza natural de Nueva Zelanda no solo es impresionante sino que también te sumerge en el mundo de Tolkien.
Las dunas doradas del Desierto del Sahara en Marruecos fueron el escenario para algunas de las escenas más memorables de "Gladiator", especialmente la secuencia de apertura donde Máximo escapa de los enemigos. La ciudad de Aït Benhaddou, con su impresionante arquitectura, también ha sido protagonista en varias producciones, incluyendo "Lawrence de Arabia" y "Juego de Tronos". Visitar estos sitios es como caminar directamente a través de la historia del cine.
El sur de India, específicamente la ciudad de Puducherry, fue el escenario para algunas de las escenas de "La Vida de Pi", donde se pudieron capturar la magia y el misterio de la historia. El templo de Sri Aurobindo Ashram y la playa de Promenade son puntos clave que los cinéfilos pueden explorar, ofreciendo una inmersión cultural y visual única.
Aunque "Juego de Tronos" no es una película, su impacto en la industria y el turismo cinematográfico es indiscutible. Dubrovnik, en Croacia, se transformó en King's Landing. Caminar por las murallas de la ciudad, visitar Fort Lovrijenac, o simplemente pasear por sus calles es como entrar en el mundo de Westeros. La ciudad ha abrazado su fama cinematográfica, ofreciendo tours especializados para los fans.
La ciudad del amor, París, ha sido escenario de innumerables películas, pero "Amélie" captura su esencia de una manera encantadoramente única. Desde el Café des Deux Moulins en Montmartre, donde trabajaba Amélie, hasta el Canal Saint-Martin, donde se desarrollan varias escenas, París ofrece una experiencia cinematográfica a cada paso, especialmente para quienes buscan el romance y la magia en cada rincón.
El Día Mundial del Cine no solo celebra las películas, sino también los lugares que las han hecho posibles, convirtiendo el acto de viajar en una experiencia de inmersión cinematográfica. Estos destinos no solo ofrecen la belleza natural o histórica, sino que también brindan una conexión personal con las historias que hemos amado en la pantalla. Así que, si estás planeando tu próximo viaje, considera estos lugares para vivir el cine de una manera que solo el viaje puede ofrecer.