A la entrada del Mercadillo Navideño de Viena de la Rathausplatz, un pórtico de varios metros de altura recibe a los visitantes. El tradicional Mercadillo Navideño con puestos donde comprar regalos navideños, decoración para árboles de Navidad, artesanía, delicias culinarias, dulces y bebidas para entrar en calor.
El patinaje sobre hielo en el que podrán dar románticas vueltas por el Sueño de Hielo del Mercadillo Navideña, con el Rathauspark y su romántica iluminación como telón de fondo.
El árbol de Navidad Herzerlbaum es un punto de atracción para los enamorados. Para los niños hay un carrusel de varios niveles y 12 metros de altura y todo un mundo navideño en el parque, donde hay un trineo tirado por animales, un recorrido por el Belén y una cabaña infantil con su propia pista de patinaje sobre hielo.
Los mercados navideños en Viena son una tradición milenaria. Se remontan a la Edad Media cuando en 1298 Albrecht concedió a los ciudadanos de Viena el privilegio de tener un mercado de diciembre o "Krippenmarkt".
El pequeño y acogedor Mercado de Navidad de Karlsplatz está situado en un escenario bonito enfrente de la iglesia de San Carlos. Es un lugar ideal para ir con niños donde hay diversas actividades dedicadas a ellos. Todos los productos gastronómicos que se ofrecen son biológicos.
Mercados en el Palacio de Schönbrunn: Nada más imperial que este mercadillo navideño situado en el patio del Palacio de Schönbrunn, patrimonio de la Humanidad.
Mercado de Navidad de Spittelberg: se caracteriza por ofrecer productos artesanos como objetos de arte, cerámica, joyas de plata, esmalte y latón. Aproveche para comer en uno de sus muchos restaurantes.
El mercado navideño del Belvedere se situa en un ambiente imperial. Además del escenario barroco que lo rodea, también se pueden admirar los hermosos jardines del Belvedere. El edificio de arriba es una de las principales atracciones de Viena y alberga una pinacoteca con el famoso cuadro del "beso" de Gustav Klimt.
El mercado "Weihnachtsdorf Maria-Theresien-Platz" se encuentra situado entre los museos de historia del arte y de historia natural. Durante el Adviento alrededor de 60 puestos se levantan aquí ofreciendo artesanía tradicional e ideas originales para regalar.
Desde mediados de noviembre, las plazas más bonitas de Viena se convierten en encantadores mercadillos navideños. Las personas con apego a la tradición se encontrarán en su ambiente en los entornos del Mercadillo Navideño de Viena en la Rathausplatz, el Antiguo mercadillo navideño en la Freyung o en el mercado de navidad de Stephansplatz. A los amantes de la artesanía se aconseja visitar los mercadillos navideños de Karlsplatz o de Spittelberg. Los mercadillos navideños situados ante el Palacio Schönbrunn y el Palacio del Belvedere también desprenden un encanto único e imperial. En el mercadillo de invierno en la Plaza de la Noria Gigante también hay acción.
Cada mercadillo navideño tiene su encanto particular, así como ofertas especiales para la diversión de los niños. Pero hay una cosa que todos tienen en común: las tentaciones dulces y culinarias llaman desde cada rincón. Y durante algún paseo por los mercadillos navideños siempre se puede encontrar algún regalo que otro.
Además del olor a ponche, galletas y almendras asadas, en Navidad la música está en el aire. El ambiente navideño llega a Viena en forma de conciertos clásicos de Adviento, conciertos de iglesia y alegres cantos corales y vibrantes noches musicales y espectáculos.
En cambio de año se celebra y se baila en toda Viena. Hacia medianoche, los vieneses, las vienesas y quienes vienen a visitar la ciudad bailan al son de la Pummerin, la campana de la Catedral de San Esteban. El repicar de la Pummerin en Nochevieja se transmite incluso por radio y televisión seguido del famoso vals del Danubio de Johann Strauss. El 1 de enero se celebrará en varios lugares el Concierto de Año Nuevo de la Orquesta Filarmónica de Viena en directo desde el Musikverein, que seguirán millones de telespectadores en más de 90 países.
Después de Nochevieja, la noche continúa en los bailes vieneses. Tampoco falta baile sobre hielo en la ciudad. Las numerosas pistas de patinaje sobre hielo de Viena la convierten en un verdadero sueño para los amantes de esta práctica. La más grande y conocida es el Sueño de Hielo de la Rathausplatz. En la comodidad de las cafeterías vienesas se puede entrar en calor. O en uno de los más de 100 museos vieneses donde se pueden ver colecciones de nivel internacional.
Una publicación compartida de #TravelMagazineSpain (@travelmagazinespain)