España recibió en julio 2,46 millones de turistas internacionales, lo que supone un 70,5% menos que en el mismo mes del año pasado (14,55 millones), mientras que su gasto se contrajo un 79,5%, y se quedó en 2.450 millones de euros (frente a 11.941 millones de julio de 2019), según informó este martes el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En el primer mes fuerte de visitantes e ingresos de la temporada veraniega, la caída de llegada en términos porcentuales es, una vez finalizado el estado de alarma, menos acusada que en junio, que fue del 97,7%, y que en los meses de abril y mayo, que alcanzó el 100% con el cierre de fronteras.
En julio, Francia fue el principal país emisor, con 597.244 turistas, lo que representa el 24,2% del total y un descenso del 58,4% respecto a julio del año pasado.
Alemania y Reino Unido son los siguientes países con más turistas que visitan España. Alemania aporta 432.302, un 65,2% menos en tasa anual, y Reino Unido 377.886, con el mayor desplome de los principales países emisores que alcanza el 82,5%.
Baleares es el primer destino principal de los turistas en julio, con el 23,9% del total. Le siguen Cataluña (17,7%) y Comunidad Valenciana (15,5%). A Baleares llegan 588.431 turistas, un 74,9% menos que en julio del año pasado. Los principales países de residencia de los turistas de esta comunidad son Alemania (con el 42,3% del total) y Reino Unido (16,2%).
El número de turistas que visitan Cataluña disminuye un 81,6% y se sitúa en 436.742. El 41,4% procede de Francia y el 11,8% del agregado resto de Europa. La tercera región de destino principal por número de turistas es Comunidad Valenciana, con 383.013 turistas y una disminución anual del 69,2%. Francia es el principal país de origen (con el 24,1% del total), seguido de Reino Unido (18,3%).
En el resto de comunidades, el número de turistas desciende un 71,4% en Andalucía, un 79,1% en Canarias y un 87,8% en Comunidad de Madrid. La duración media de los viajes de los turistas internacionales es de 8,1 días, lo que supone un aumento de 0,6 días respecto a la media de julio de 2019.
Por vías de entrada de turistas extranjeros, la aeroportuaria es la que recibe más llegadas en julio, con más de 1,6 millones, lo que supone un descenso anual del 79,7%. Por carretera llegan un 52,8% menos de turistas, por puerto un 93,1% menos y por ferrocarril acceden un 78,4% menos.
En cuanto a tipo de alojamiento, el número de turistas que utilizan el alojamiento de mercado como modo de estancia principal en julio disminuye un 79,6% en tasa anual. Dentro de este tipo, el alojamiento hotelero baja un 82,3% y la vivienda en alquiler un 69,9%. Por su parte, el alojamiento de no mercado disminuye un 50,2%. Los turistas alojados en vivienda de familiares o amigos bajan un 52,3% y los hospedados en vivienda en propiedad un 45,7%.
La estadística del INE refleja que el gasto medio por turista se sitúa en julio en 994 euros, con un descenso anual del 17,8%. Por su parte, el gasto medio diario baja un 23,3%, hasta los 123 euros.
Los principales países emisores en cuanto al nivel de gasto en julio son Alemania (con el 18,7% del total), Francia (15,3%) y Reino Unido (15,2%). El gasto de los turistas residentes en Alemania disminuye un 67,5% en tasa anual, el de los turistas procedentes de Francia un 65,2% y el de los de Reino Unido un 84,7%.
El gasto de los turistas disminuye un 77,9% en tasa anual en Islas Baleares, un 85,8% en Cataluña y un 72,2% en Comunidad Valenciana. El resto de comunidades de destino principal de los turistas también presentan tasas anuales negativas.
El 47,4% del gasto total en julio lo realizan turistas que pernoctan en alojamientos hoteleros, con un descenso anual del 85,1%. Por su parte, el gasto en alojamientos de no mercado se reduce un 58,6%. El gasto de los turistas que no viajan con paquete turístico (que representa el 81,8% del total) baja un 75,6% en tasa anual. El de los que contratan paquete turístico se reduce un 88,1%.
En el acumulado de los siete primeros meses del año, España ha visto reducir la llegada de turistas internacionales un 72,4% en comparación con el mismo periodo de 2019, hasta los 13,2 millones, y su gasto ha menguado un 72,6% respecto al mismo periodo del año anterior, quedándose en 14.291 millones de euros.
El secretario de Estado de Turismo, Fernando Valdés, valoró en un comunicado que “estos datos reflejan cómo la Covid-19 está afectando de manera negativa en el sector turístico por las restricciones a la movilidad a nivel internacional y la falta de la confianza en los viajes internacionales, un impacto que se está dejando sentir a nivel mundial”.
Para Valdés, es significativo no obstante que el turista que nos ha visitado haya optado por estancias incluso más largas que en 2019. “Demuestra que entre quienes deciden viajar a nuestro país, la COVID-19 no ha alterado sus planes en lo que a duración de la estancia se refiere, lo que es indicativo de la percepción de España como destino seguro”, afirmó.