Todos dicen que es el año de viajar por España, lo que, en realidad, no es ninguna novedad: cada año desde hace décadas, más del 90% de los españoles eligen para sus viajes los pueblos y ciudades, las playas y montañas, los monumentos y paisajes... de España. Hay mucho donde elegir. Así que este año de la pandemia, lo haremos con mayor razón.
Cada destino hace sus propuestas que tratan de destacar sobre las demás. Cada uno ofrece lo mejor de sí mismo con el máximo de facilidades, con el máximo de garantías. Santiago de Compostela, la capital de Galicia, no se quiere quedar atrás, sobre todo en vísperas de un nuevo Año Santo compostelano en 2021. Al grito de 'Ultreia', un saludo medieval de ánimo que utilizaban los peregrinos al cruzarse en el camino, Turismo de Santiago ha puesto en marcha un plan de acciones especiales para la recuperación del turismo que parte del principio de transmitir seguridad a las personas que visiten la ciudad a corto y mediano plazo y, como es obligado en estos tiempos, captar turismo español y portugués que se desplace por la península sin querer caer en aglomeraciones. Galicia es una de las Comunidades que mejor ha superado el coronavirus, en los últimos días no registra nuevos fallecidos ni siquiera contagiados.
Santiago estaba viviendo unos años de crecimiento muy importante, por lo que es imprescindible recuperar lo antes posible la tendencia creciente de la demanda turística. El plan incluye múltiples acciones para la captación y recuperación del turismo en la ciudad, entre las que destacan, a modo de resumen, la Campaña Ultreia, que posiciona claramente a la ciudad como la meta a la que llegar tras el esfuerzo personal y colectivo de la peregrinación; transmitir una imagen de destino seguro que implica especialmente al sector hotelero con medidas como la eliminación de los desayunos buffet, favorecer el check-in on-line, reducción de los aforos, limpieza de las habitaciones y espacios comunes, etc.; recuperación del tráfico aéreo a través del contacto permanente con las principales compañías que operan en el aeropuerto de Santiago y diversas acciones relacionadas con el turismo y eventos virtuales.
Una aparición de piedra
Todo lo anterior debe llevar a que muchos viajeros visiten Santiago, ya sea como meta final de su peregrinación larga o corta o como destino en sí mismo, con atractivos que no defraudan. Santiago de Compostela, ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO gracias a su belleza monumental, extraordinaria conservación y por ser meta del milenario Camino de Santiago, que desde el siglo IX transformó este paraje del finis terrae en punto de encuentro de la fe y el pensamiento del mundo occidental. Cada año miles y miles de peregrinos se lanzan, bien a pie, en bicicleta o a caballo, a vivir esta experiencia en la que se mezclan aventura y espiritualidad, y cuya meta final es la catedral de Santiago, una de las ciudades santas de la cristiandad.
Santiago de Compostela es una aparición de piedra anidada entre los verdes bosques del Noroeste español y las cercanas rías gallegas. Comenzó por ser lugar de paso junto a una vía romana, pero el descubrimiento de la tumba del Apóstol Santiago a principios del siglo IX hizo surgir un lugar de culto en los confines de una península que estaba dominada por la invasión musulmana. Desde entonces toda Europa se echó a andar hacia Santiago, en la que les esperaba la gracia de la absolución plenaria. Allí emergió una catedral románica a la que el transcurrir de los siglos quiso añadir la sobriedad del Renacimiento y la majestuosidad de un Barroco que terminó por trazar la imagen monumental de la urbe, hecha del granito de sus monasterios, sus hospitales de peregrinos, sus numerosas iglesias, sus casas señoriales y unas plazas en las que el tiempo escogió quedarse detenido.
La tradición continúa viva y la espiritualidad del continente sigue mirando a Compostela, como demostraron los últimos Años Santos y como probarán sin duda la cita jubilar de 2021, cuando serán de nuevo protagonistas los peregrinos, con acentos de todo el mundo, cuyos pasos retumban en las calles de piedra. La continua corriente de peregrinos que durante siglos ha llegado a la ciudad convierten Santiago en un monumental catalizador de ideas e influencias procedentes de toda Europa. Para los visitantes guarda la ciudad sus tesoros, que se exhiben en 16 museos, y la sorprendente riqueza de su arquitectura contemporánea, alrededor de la cual se extiende la más importante dotación de parques y jardines de toda Galicia.
En este escenario brotan con fuerza las manifestaciones culturales desde las fiestas populares hasta los festivales anuales de música, cine y teatro , exposiciones permanentes e itinerantes de la mano de una iniciativa pública y privada liderada por la cinco veces centenaria Universidad de Santiago. Divertida, alegre y jovial, el espíritu universitario de Santiago contagia alegría y vitalidad. Los 33.000 alumnos que cada año estudian en su Universidad dan a la ciudad este ambiente tan especial.
Durante todo el año, además, se suman a ellos varios millones de visitantes. Los que llegan exhaustos por devoción, los que acuden llamados por el prodigio monumental o los que eligen Compostela como lugar para sus eventos profesionales: todos acaban integrándose en la celebración permanente que es la vida en la ciudad, especialmente durante las Fiestas del Apóstol, declaradas de Interés Turístico Internacional. Para su bienestar despliega Santiago una red de alojamientos que supera las 10.700 plazas y una oferta gastronómica capaz de satisfacer todos los paladares y todos los bolsillos. No en vano Santiago es desde hace más de mil años una tierra de acogida universal, un punto de llegada y encuentro nacido para el ejercicio cotidiano de la hospitalidad.