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Visitar Madríd en invierno

Redacción | Viernes 13 de enero de 2017

30 razones para visitar Madrid



Madrid destaca por su amplia oferta cultural y de ocio, no pararas desde la primera hora de la mañana hasta bien entrada la madrugada. Desayunar en algún lugar con historia puede ser la alternativa más temprana, y una velada flamenca, la más noctámbula. Pero, entre ambas, se abre todo un mundo de posibilidades. Tantas que, si estás de paso, tendrás que pensar en quedarte más tiempo… o regresar. Hay muchas más, pero éstas son 30 cosas que no debes dejar de hacer durante tu estancia.

1. Madrid Río. Recorreloen bici, patines ó simplemente, caminando. El parque de Madrid, a orillas del río Manzanares, con zonas verdes, áreas de juego y puentes que son obras de arte contemporáneas. Por tener, Madrid Río tiene hasta una playa.

2. La Plaza Mayor. Paseos para escuchar y aprender en SOL, dónde vivió Cervantes, qué rey preside la Plaza Mayor, historias de fantasmas… De una forma original y entretenida, las Visitas Guiadas Oficiales de Madrid Destino invitan a conocer la ciudad desde una perspectiva diferente. www.esmadrid.com/visitasguiadas

3. La Latinay no s ólo para tomar un aperitivo o unas tapas: también para tomar el sol, incluso en invierno. El barrio más castizo de Madrid tiene, además, plazas y algún que otro jardín secreto para relajarse y escaparse del bullicio de la ciudad.

4. El Rastro. El mercado al aire libre más famoso de Madrid sólo los domingos por la mañana y los días festivos, las tiendas de antigüedades de los alrededores abren todos los días. Siempre hay algún tesoro esperando .(LA LATINA, PUERTA DE TOLEDO).

5. Chueca: El Mercado de San Miguel, junto a la Plaza Mayor, y el Mercado de San Antón, en el barrio de Chueca, no son sólo lugares donde hacer la compra. Son auténticos puntos de encuentro para tomar un café, una copa o degustar in situ los mejores productos frescos. ¿Qué tal unas ostras con champán?

6. La hora del Cambio de Guardia. (ÓPERA). Pífanos y tambores acompañan el paso de lanceros y alabarderos en el Relevo Solemne de la Guardia Real que tiene lugar el primer miércoles de cada mes, si el tiempo y los actos oficiales lo permiten, en el Palacio Real. En total, participan 400 personas y cien caballos.

7. Museo del Prado. ¿Cuál es el misterio de Las Meninas?. Para descubrir las incógnitas y secretos que esconde la obra maestra de Velázquez. Allí convive con otras pinturas de artistas tan imprescindibles como Goya, Tiziano, Rafael, Rubens o El Bosco.

8. Paseo del Arte. Sus dos kilómetros sirven para articular un recorrido por toda la historia de la pintura occidental. Una gran avenida cultural para pasar de El Jardín de las Delicias de El Bosco (Museo del Prado) a la Habitación de Hotel de Edward Hopper (Museo Thyssen-Bornemisza) y terminar frente al Guernica de Picasso (Museo Reina Sofía).

9. Madrid de los Austrias. Palacios, monasterios, iglesias barrocas, pero sobre todo rincones llenos de encanto. El barrio con más historia de Madrid, en pleno centro, es el mejor lugar para perderse. Comercios centenarios y talleres artesanos dan aún más color a sus calles.

10. El Retiro. Hay un ángel caído, un palacio de cristal, una antigua vaquería y un ahuehuete que, con sus casi 400 años, es el árbol más antiguo de Madrid. Caminar entre los senderos del parque, auténtico pulmón verde de la ciudad y como no, remar en su estanque.

11. Aprender español mientras tomas unas tapas es un destino perfecto para que, quienes vienen de fuera, pongan en práctica su español. La Real Academia de la Lengua y el Instituto Cervantes tienen su sede aquí. Pero las mejores conversaciones siempre surgen, espontáneas, en cualquier bar ante unas cañas y unas tapas.

12. Un cocido a fuego lento. Primero, la sopa. Después, los garbanzos y las verduras. Y, por último, la carne. El cocido madrileño, que se sirve en dos o tres vuelcos, es el plato estrella de la gastronomía local. Los restaurantes tradicionales siempre lo incluyen en su menú.

13. Cambio de look en Malasaña y Triball. Ropa desenfadada, divertida, original, incluso con un toque vintage. En estos dos barrios a la última, a sólo unos pasos de la Gran Vía, abren sus puertas pequeñas tiendas de autor. La calle de Fuencarral es su espina dorsal.

14. Shopping en el Barrio de Salamanca. (SERRANO, GOYA, VELÁZQUEZ). Una gran pasarela de moda. Así son la calle de Serrano y todas las que la rodean. Zapaterías, joyerías y grandes firmas de moda, nacionales e internacionales, exhiben sus sofisticados diseños en escaparates que son toda una tentación.

15. Una noche en la ópera. El Teatro Real de Madrid es uno de los grandes escenarios de Europa, con una programación muy cuidada durante todo el año, en la que no faltan las voces más destacadas de la lírica mundial. Un gran templo de la ópera que también organiza visitas guiadas.

16. Huellas literarias. (SEVILLA, ANTÓN MARTÍN) ¿No es cierto ángel de amor? Los versos de José Zorrilla, autor de Don Juan Tenorio, acompañan nuestros pasos por el Barrio de las Letras, con fragmentos de obras de grandes escritores, como Cervantes, Quevedo o Góngora, grabados en el suelo.

17. Casas que son museos. La casa en la que vivió Lope de Vega ( ANTÓN MARTÍN) tiene un huerto y habitaciones con muebles de época. La de Joaquín Sorolla ( IGLESIA), un precioso jardín y el taller en el que realizó algunas de sus obras más importantes. Son museos pequeños, íntimos, como el Cerralbo ( PLAZA DE ESPAÑA), el Lázaro Galdiano ( RUBÉN DARÍO) o el del Romanticismo ( TRIBUNAL), ubicados en palacetes antiguos.

18. Sostener las torres inclinada. (PLAZA DE CASTILLA). Están en la plaza de Castilla y son todo un símbolo cinematográfico. Y, como tal, hay que llevarse un recuerdo de ellas: quizás baste con hacerse una foto en la que, falseando la escala, parezca que las sostenemos con las manos.

19. Maneras de cantar un gol. (SANTIAGO BERNABÉU, PIRÁMIDES). Asistir a un partido en el Santiago Bernabéu, estadio del Real Madrid, o en el Vicente Calderón, feudo del Atlético de Madrid, puede ser una experiencia única que se puede completar con una visita a sus respectivos museos.

20. Con las mejores vistas. Imposible resistirse a contemplar la ciudad desde las alturas. Los miradores de CentroCentro ( BANCO DE ESPAÑA) y el Círculo de Bellas Artes ( SEVILLA) ofrecen, además, restaurantes y barras para tomar una copa. En Madrid hay que mirar siempre hacia arriba: algunos hoteles cuentan con azoteas muy animadas.

21. Atardecer en el Templo de Debod. (PLAZA DE ESPAÑA). Construido en la Baja Nubia en el siglo II a.C., el templo es un regalo de Egipto a España por su ayuda en la recuperación de monumentos durante la construcción de la presa de Asuán. Desde aquí se disfruta del mejor atardecer.

22. Veladas flamencas. Madrid es la capital mundial del flamenco, declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. El baile y el cante jondo son pura emoción, sentimientos a flor de piel que hacen estremecerse a quien lo ve y lo escucha. La ciudad está repleta de tablaos donde vivir una noche inolvidable entre quejíos y soleás. Esto es arte.

23. Admirar la grandeza del toro de lidia. (VENTAS). La Plaza de Toros de Las Ventas es la más importante del mundo. Su público tiene fama de ser el más exigente. No hay torero que se precie que no sueñe con una tarde de gloria y salir por la puerta grande.

24. Buscar en la Puerta del Sol el Km 0. Puerta del Sol. Aunque la plaza más céntrica y concurrida de Madrid tiene ilustres inquilinos, como el Oso y el Madroño, hay que mirar al suelo. Una placa señala el lugar exacto donde nacen las seis carreteras radiales de España. Una pista: está delante de la Real Casa de Correos.

25. Bailar hasta las tantas en Chueca. El barrio de Chueca es diverso, cosmopolita, abierto, centro neurálgico del colectivo LGTB y de las fiestas del Orgullo que se celebran a principios del mes de julio. Sus locales, desenfadados y divertidos, son un buen lugar donde prolongar la noche.

26. Un bocata de calamares en la Plaza Mayor. ¡No hay nada más típico en Madrid! Y, en torno a la plaza, hay un sinfín de bares para cumplir con tan sabrosa costumbre. Y eso que aquí ¡no hay mar!

27. Una foto con Don Quijote. PLAZA DE ESPAÑA. El hidalgo de la triste figura y su fiel escudero, Sancho Panza, son los personajes que más flashes reciben en el monumento a Miguel de Cervantes de la Plaza de España.

28. Un chocolate con churros. Para desayunar, merendar o desperezarse tras una noche de fiesta. Nadie puede sentirse madrileño de verdad si no lo prueba alguna vez. Es tradición desde el siglo XIX.

29. ¡Esto es espectáculo!. (GRAN VÍA, CALLAO, PLAZA DE ESPAÑA). La centenaria Gran Vía madrileña es la gran avenida del espectáculo. Sus teatros acogen durante todo el año musicales y otras producciones que no hay que perderse. La cartelera de Madrid siempre aguarda con sorpresa.

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