Santa Eulalia de Oscos ya puede gritar bien alto que es la nueva Capital del Turismo Rural 2024, el certamen organizado por EscapadaRural. Esta villa, camuflada entre el verdor del Occidente asturiano, le toma el relevo a Campo Lameiro (ganadora de la anterior edición) gracias a que, de los casi 80.000 votos de los viajeros, un 22,8% fue para ellos.
Y es que, aunque la comarca Oscos-Eo donde se encuentra es una de las menos turísticas de Asturias, tiene todo lo que caracteriza al Principado: frondosos bosques, ríos, cascadas, aldeas con arquitectura de montaña y una gastronomía con la que quedarse ‘fartuco’ (lleno en asturiano).
En 2016, Los Oscos -Santa Eulalia, San Martín y Villanueva de Oscos- fueron reconocidos como Pueblo Ejemplar de Asturias. Una curiosidad, si alguien dice Santalla d´Ozcos estás en el lugar correcto. Este es su nombre en su lengua local, el eonaviego.
A Santa Eulalia de Oscos la llaman la tierra del agua y del fuego. Agua, por sus ríos que mueven molinos, y fuego, por sus tradicionales oficios como el del herrero. El Conjunto Etnográfico de Mazonovo es testigo de ambas cosas, pues su nombre se debe a un mazo hidráulico que servía para estirar el hierro desde el siglo XVIII.
“Una visita por este museo vivo nos permitirá conocer uno de los principales oficios que tuvo la zona y disfrutar de la belleza de su entorno, con sus inmuebles de piedra situados entre la vegetación y junto al río”, aconseja Judith Monmanny, responsable de comunicación de EscapadaRural, que añade que “tampoco te pierdas una visita a Hyottoko Artesanía, la tienda de navajas artesanales que está en Santa Eulalia de Oscos”.
Museo Casa Natal del Marqués de Sargadelos
Posiblemente el nombre te suene y te lleve inevitablemente a Galicia, de donde es y donde más fama ha adquirido esta cerámica de colores. Sin embargo, su creación viene de un noble: el marqués de Sargadelos que, aunque construyó en Sargadelos (Lugo) su fábrica de fundición de hierro colado y loza (una de las primeras de España), era oriundo de Los Oscos. Hablamos de Antonio Raimundo Ibáñez.
Su casa natal, hoy convertida en museo, está en la calle Ferreirela de Baxo. El precio de la entrada cuesta unos 3 euros y en ella, además, de poder ver cómo era la vivienda del marqués en el siglo XVIII, también se ofrecen talleres para elaborar jabón artesano, velas, cosmética natural, etc.
Darse un baño o hacer kayak en Ferreira
La comarca de los Oscos-Eo es Reserva Mundial de la Biosfera y es la única de las siete reservas asturianas que tiene salida al mar. A media hora en coche llegamos a las playas de Castropol y, un poco más adelante, a las de Tapia de Casariego (perfectas para practicar surf).
No obstante, no hace falta salir de Los Oscos para darse un chapuzón (eso sí, frío, muy frío). Si el tiempo acompaña, a solo cinco minutos de Santa Eulalia de Oscos está el área recreativa de Ferreira, una pequeña aldea con mucho encanto.
Allí, no muy lejos de las casas de los vecinos encontraremos merenderos y la zona de baño del río Agueira. También hay opción de alquilar un kayak y descender el río. En algunos tramos hay rápidos.
Visitar el monasterio de Villanueva de Oscos
El monasterio de Villanueva de Oscos es una de las joyas arquitectónicas de la comarca. De estilo románico, fue construido en el siglo XII por orden del rey Alfonso VII como convento para los monjes benedictinos. Algunas de sus partes están en ruinas y el resto fueron reformadas. En él llama la atención la sobriedad de su fachada y de sus muros.
La misma sencillez que podemos encontrar en su interior. El único elemento ornamental es un arcosolio utilizado como lugar de enterramiento en donde reposan los restos del obispo Juan Álvarez Osorio.
Hay que advertir que el monasterio está cerrado temporalmente.
Hacer la ruta de A Seimeira
La ruta de A Seimeira recibe el nombre de la cascada que nos encontraremos al final del recorrido. Se trata de una ruta sencilla de 3,4 kilómetros (solo ida), que comienza en el área recreativa de Pumares y que pasa junto al pueblo abandonado de Ancadeira y el valle del Desterrado.
Desde el inicio de la ruta hay opción de subir hasta Pumares, uno de los pueblos de arquitectura tradicional de Los Oscos. Y, una vez llegados a la cascada, antes de volver, un kilómetro más adelante podemos llegar al pueblo de Busqueimados, que destaca por sus dos tejos plantados en sus aledaños.
Llega a Santa Eulalia de Oscos de forma barata y rápida
Una de las mejores maneras de llegar a Santa Eulalia de Oscos de manera eficiente, sostenible y económica es publicando tu viaje en BlaBlaCar, si llevas tu propio coche, o buscando en la plataforma si hay asientos vacíos disponibles para llegar.
El precio medio en el último año de un viaje a Santa Eulalia de Oscos es de 11 euros y la distancia media de 168 kilómetros. Los destinos de origen más populares son Gijón, Oviedo, San Martín del Rey Aurelio, Salamanca, Quijorna, etc.