Los actos conmemorativos tendrán lugar a lo largo de todo el año en cada uno de los rincones de Costa Rica, sumándose organismos e instituciones, muy especialmente a partir del 15 de septiembre, día en que se declaró oficialmente la independencia de Guatemala en el año 1821, y que supuso el pistoletazo de salida para la independencia de otros países como El Salvador, Nicaragua, Honduras y Costa Rica. A mediados de octubre de ese año, y siguiendo los acontecimientos del resto de territorios latinoamericanos, los delegados de los pueblos ticos se reunieron en Cartago para declarar la independencia de Costa Rica el 29 de octubre de 1821.
Alajuela, Heredia, San José, Cartago, Ujarraz, Barva o Bagaces son algunos de los pueblos donde se preparan para acoger los eventos de celebración del Bicentenario. Las actividades oficiales se irán coordinando de acuerdo a la evolución de la pandemia.
Un 2020 comprometido con la salud y el medio ambiente
Aunque este año ha estado marcado por la pandemia, Costa Rica ha seguido una estrategia turística dirigida a continuar con el apoyo a las pequeñas y medianas empresas turísticas con la colaboración entre el sector público y privado para mejorar la calidad del producto turístico y respetar los protocolos sanitarios. Además, sigue aunando esfuerzos por consolidar los centros de desarrollo turístico, creados en zonas de alto potencial para el desarrollo una oferta diferencial y con un contacto cercano con la cultura, las tradiciones y la gastronomía de los pueblos y ciudades.
De cara a 2021, Costa Rica se sigue posicionando como un destino “sostenible” para todo el año, con múltiples alternativas desde bienestar, aventura, avistamiento de aves, naturaleza y turismo rural, cultura, lunas de miel, sol y playa, familias, reuniones y convenciones o cruceros, dando a conocer nuevas zonas con alto potencial de desarrollo de hoteles, productos y segmentos turísticos mediante una integración conjunta de acciones de marketing, relaciones públicas y junto con el sector profesional turístico.
Aunque el país es pequeño y cubre solo el 0.03% de la superficie del planeta, es el hábitat del 6% de la biodiversidad mundial y el 25% de su territorio está protegido bajo diversas formas de conservación. Muestra de su ADN sostenible, son las iniciativas destinadas a la conservación del medio ambiente y que contribuyen al Plan de Descarbonización iniciado desde el Gobierno. Un hecho que ha servido a Costa Rica para convertirse en uno de los países ganadores en la última edición de los Premios de Acción Mundial sobre el Clima de la ONU por su Programa de pagos por servicios ambientales (PSA) que ha beneficiado más de 18.500 familias.
Mirando al futuro
Con el objetivo de reactivar el empleo turístico, especialmente en las zonas rurales de Costa Rica pertenecientes a las regiones de Guanacaste, Zona Norte, Pacífico Central, Pacífico Sur y Caribe, Costa Rica anunció el pasado 26 de octubre que no era necesario una prueba negativa PCR para entrar al país vía aérea para los pasajeros tanto nacionales como extranjeros.
La apertura de la frontera aérea es de vital importancia para la reactivación del empleo a través de la industria turística, que a su vez es uno de los principales motores de la economía nacional, responsable de casi 10 puntos del Producto Interno Bruto y de más de 600 mil puestos de trabajo directos e indirectos antes de la pandemia. La reactivación de la industria turística, además, conlleva la generación de divisas, de crucial importancia para la estabilidad del tipo de cambio del dólar con respecto al colón.
Actualmente, más de 300 compañías ticas cuentan con el sello Safe Travels, otorgado por el Consejo Mundial de Viajes y Turismo al país, que garantiza el cumplimiento de los protocolos sanitarios para las actividades turísticas.